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miércoles, 28 de octubre de 2009

lunes, 26 de octubre de 2009

Patinando

Llueve sobre mojado

Las depresiones momentanias, esas que hacen creer que el mundo está fuera y tú dentro, como si no te sintieras parte de él, realmente llegas a creer que nada tiene que ver con lo que pasó ayer, o no imaginas que lo que pasará mañana tendrá relación, simplemente un día te levantas, miras por la ventana y no haces más que pensar que nada es lo que tiene que ser, nada funciona como tiene que funcionar y por supuesto que tú no eres quien debes ser. Sin embargo, no puedes quedarte parada, no sabes por qué, pero no puedes hacerlo, así que te mueves, y entonces te ríes con la primera persona que te cruzas. Y entonces entiendes la felicidad momentania, esa que hace creer que todo va bien, que tan solo debes ir dónde tenías previsto, y de repente vuelves a pensar que todo es una cadena, que la cosa puede funcionar y que tú, aun no siendo quien deberías ser, encajas en el mundo.

domingo, 18 de octubre de 2009

La locura en sus zapatos

No podía parar de mirarla. Su belleza tan imperfecta la deslumbraba. Allí estaba, cruzando la calle, jugando a pisar tan solo el blanco de los pasos de cebra, en el cual se perdía, con el cual se fusionaba. Su veraniego blanco vestido, de tela muy fina, saboreaba cada curva de su cuerpo y dejaba entrever la voluptuosa forma de su pecho, impecable y definido. Sus cabellos despeinados se movian al son de cada salto, y sus sandalias dibujaban los pies más finos y blancos que jamás ella había visto. La locura la poseía, parecía escuchar una música que salía desde lo más profundo de su corazón, adoptaba movimientos armónicos, sus brazos imitaban las alas de los ángeles, esos que siempre imaginamos, callados y solitarios, hermosos, y bailaba, desde un lado de la acera hasta llegar al otro, y aun lo hacía después. No le importaba la gente, era libre. Era una mujer recién sacada de los años 60, como si hubiera estado encarcelada dentro de un cuadro y hubiera decidido escapar de la moral de un pintor que cree que la mujer es solo belleza si estima las normas que rige nadie. Ella era libre. Y en esa calle, mientras demostraba su libertad, estaba Miranda, andrógina hasta los zapatos, admirando la grandeza de la feminidad. Seria, abrigada por su chaqueta de cuero, mostrando cara de esfinge, siempre haciendo ver que nada desata sus emociones, había sentido en un instante toda la pasión que existe en las mujeres, paralizada y dejando hablar a sus ojos, entendió que el amor se lo estaba dando una persona que no había visto nunca y que seguramente no volvería a ver más. El amor somos cada uno de nosotros en nuestra máxima expresión, y ella, ahora, le amaba por ser quien quiso ser en el instante que precisó.

miércoles, 14 de octubre de 2009

Destruir lo construido

-Cuando ella te mira, no ve a una mujer negra o a una mujer blanca. Mira la mujer que ama.
-Ve lo que quiere ver.
-A lo mejor ve lo que le dejas ver. A lo mejor antes no importaba. A lo mejor era lo que te funcionaba mejor en todos estos años. Tomar todas tus cosas buenas y juntarlas en tu bonita vida. Es lo que dejas ver cuando la gente quiere ver.
-¿Qué intentas decir?
-¡Nada! Sólo que a lo mejor es más fácil así para ti de esa forma.
-Muy bonito, muy bonito de verdad...
-Yo soy siempre la que huye, pero no hagas lo mismo. Espera, escúchame, porque no voy a decirte lo que crees: sólo hay una cosa que llega a todas nuestras realidades... es el amor! Es el puente entre todas nuestras diferencias. Y tu tienes mucho amor en tu vida. ¿Por que intentas tirar abajo ese puente?

Diálogo entre Bette Porter i Kit Porter en The L word.

Cuando la gente se interesa por mi, dejo ver lo que quiero. Soy bastante inconsciente sobre ello, pero soy una persona bastante misteriosa que habla mucho y no dice nada. Por ese mismo motivo he destruido cosas de mi vida que estaban a punto de llegar a su punto final, y de la misma manera actuo con las personas, les doy todo lo que quiero y puedo pero no les dejo entrar en mi caparazón, donde me refugio constantemente. Aparentemente soy un mundo, y sin embargo, en mi más sincera intimidad soy otro, y mucho más importante, soy otra persona dentro de ese mundo. Tan solo el amor consigue que este gran caparazón se debilite y se abra con una precisa y frágil sutileza, dejando mi mente y mi cuerpo completamente desnudos. Debo conseguir no autodestruir lo que quiero, debo conseguir no autodestruir lo que amo, debo no autodestruirme. Las excusas no valen. Y yo la quiero.

jueves, 8 de octubre de 2009

Curiosidad

Dicen que la curiosidad mató el gato, quizás matase tan solo una vida y le quedasen todavía unas tantas, o puede que muriese y tal fue de curioso que no volvió a despertar. Yo sé que la curiosidad en este caso me ha dado vida, una vida que me acompaña. Tal vez la fría experiencia nos separe mediante puntas de hielo, pero procuro conquistarte y con calor deshacer ese espacio. Algún dia conseguiré abrazarte con el corazón, y no tengas miedo, algún día lo estaré haciendo y quiero creer que no pensaremos en más que en querernos. Algún día con la mirada te diré que ya no hay vuelta atrás. De momento deja que me enamore para poder entender este lenguage de conceptos amorosos.

Estimar-te

Estimar-te
fa que miri la vida
i me n’adoni
que són dues pinzellades,
dos espais,
dos temps,
l’un, abans,
l’altre, després,
entremig
l’inabastable instant
de restar
tota la vida
amb tu.