Los sacrificios nunca se me han dado bien. Tiendo a moverme por la delgada línia que existe entre el hedonismo y el arrepentimiento.
Pero, poco a poco la cosa va cambiando, pues el sacrificio está íntimamente ligado al hedonismo y elimina por completo el arrepentimiento.
2 comentarios:
Viva el hedonismo! Invoquemos a Baco vestidas de ménades!
EVOHÉ!
(perdón, ya salió la friki de clásicas que llevo dentro)
Hola Carmen! Que tal tot? veig que encara segueix tan viu com sempre aquest bloc!! a veure quan torno a engegar el meu!
fins aviat!
1peto.
Pere.
Publicar un comentario